Se apruebe o no la contrarreforma eléctrica, es claro que nuestro país se va a quedar rezagado.
Mientras en México el debate económico más intenso tiene que ver con la viabilidad política de la contrarreforma eléctrica y los escenarios en caso de que se apruebe, Tesla alcanzó un hito al lograr una valuación de más de un billón de dólares luego de que la marca de renta de autos Hertz emplazó una orden de compra para adquirir 100 mil teslas.
En el mundo hay un debate acerca del arribo de Tesla al club de las empresas del billón de dólares, hay quien piensa que se trata del frenesí del mercado mientras que otros lo atribuyen al liderazgo de la compañía en la industria automotriz.
Es importante destacar que la propia Hertz fue una de las compañías protagonistas del fenómeno de las meme stocks que se refiere a las acciones que fueron impulsadas por pequeños inversionistas, principalmente a través de la app de compra-venta de acciones Robin Hood, lo que le permitió a Hertz que el precio de su acción tuviera un avance cercano al 900% y salir de un proceso de bancarrota que era de pronóstico reservado. El dato es clave porque la compañía de renta de autos sabe bien de los efectos bursátiles de sumarse a una tendencia popular porque con su orden de compra, además de impulsar el precio de la acción de Tesla impulsó sus propias acciones con un avance de 10 por ciento. A precio de lista Hertz estaría pagando 3 mil millones de dólares por 100 mil teslas, lo que implica toda su posición de liquidez al segundo trimestre del año con ingresos trimestrales de mil 900 millones de dólares.
Entre los argumentos que se inclinan por pensar que la valuación de Tesla es una burbuja se encuentra el hecho de que, a pesar de que es la empresa más valiosa del sector automotriz, es realmente pequeña desde el punto de vista del volumen de vehículos que produce. En la primera mitad del año Tesla entregó 385 mil vehículos, mientras que Volkswagen 4 millones 970 mil y General Motors 3 millones 500 mil, sin embargo, la empresa que fundó Elon Musk tiene una valuación muy superior al resto de las grandes empresas automotrices combinadas. Bloomberg hizo otro análisis con respecto a Tesla que si bien es la quinta mayor empresa pública de las 500 más grandes de Estados Unidos ocupa la posición 89 por ingresos y la posición 162 por deuda total con 10 mil 100 millones de dólares. También se puede plantear que no se debe ver a Tesla como una empresa automotriz y más bien se le debe considerar una empresa tecnológica como Facebook, Amazon, Apple, Microsoft y Google.
En esa comparación resulta útil saber que cuando Apple alcanzó un valor de capitalización de mercado de un billón de dólares ello se dio con múltiplos de 4.4 veces sus ventas anuales, en el caso de Amazon 5.6 veces, Google 6.2 veces, Microsoft 9.9 veces y Facebook que tenía el mejor múltiplo, 11 veces. ¿Cuáles son los múltiplos de Tesla? 31 veces sus ventas, por lo que desde esta óptica se encuentra sobrevalorada.
En mi opinión lo que explica la valuación de Tesla es su enorme ventaja y agilidad en motores eléctricos y en sistemas de gestión autónoma, sin embargo, el activo más valioso que tiene se llama Elon Musk, porque a sus 50 años tiene un historial de innovación formidable a prueba de pesimistas y ese elemento es un gran ponderador en la valuación, aunque al mismo de tiempo un factor de fragilidad significativo y ése es el riesgo.
La valuación de Tesla le dice al mundo a través del precio de su acción que el futuro es eléctrico y que el mercado está dispuesto a premiar la visión y el riesgo para avanzar aceleradamente. ¿Qué tiene que ver la valuación de Tesla con México? Mucho, porque dicha valuación se da en un momento en que nuestro país discute si va en reversa o no en materia de energía. Se apruebe o no la contrarreforma eléctrica, es claro que nuestro país se va a quedar rezagado, no sólo como mercado de consumo, sino también como plataforma de manufactura. La valuación de Tesla muestra la enorme oportunidad que un país como México está dejando pasar y en caso de que se apruebe la reforma constitucional nos irá borrando del mapa de los países con alto potencial al contrario que Elon Musk, el liderazgo mexicano se consolida como un pasivo contingente para los próximos años.