Hoy termina en Miami, Florida el foro: Bitcoin 2022, en donde se dieron cita los entusiastas de ese activo, a juzgar por los paneles de discusión, hubo más entusiasmo que análisis y los anuncios no movieron la aguja en términos del precio de la bitcoin.
LA REGULACIÓN
Uno de los hitos que han estado esperando los entusiastas de bitcoin es que se les regule porque ello le daría validez a sus criptoactivos, por ello es que celebraron el pasado 9 de marzo, cuando el presidente Biden firmó una orden ejecutiva para el desarrollo comprensivo de activos digitales; también se entusiasmaron cuando el Tesoro de Reino Unido dio a conocer, hace unos días, un paquete de medidas tendiente a reconocer a las establecoins como una forma de pago. La celebración entraña una contradicción y es que uno de los principales argumentos de los seguidores de esta tecnología es que el activo les permite escapar del poder centralizador de los gobiernos y los bancos centrales, así como del dinero fiduciario, pero al mismo tiempo anhelan la regulación por parte de los entes de los cuales quieren emanciparse. Además, parecen no percibir que la regulación va a darle un golpe al valor de bitcoin como criptoactivo debido a que tanto Reino Unido como Estados Unidos colocan el énfasis de sus esfuerzos en las establecoins que están vinculados de manera dual a un activo tradicional como el oro, dólar, etcétera, y, al mismo tiempo, a un blockchain que es una plataforma de encriptación colaborativa. La orden ejecutiva promulgada por Biden dice lo siguiente relativo al desarrollo de monedas digitales emitidas por bancos centrales, CBDC, por sus siglas en inglés: “El dinero soberano se encuentra en el núcleo de un sistema financiero que funcione bien, con políticas macroeconómicas de estabilización y crecimiento económico. Mi gobierno otorga máxima urgencia a los esfuerzos de investigación para el desarrollo de un diseño potencial y despliegue de opciones de una CBDC de Estados Unidos”. Lo anterior implica que en la visión del gobierno de Estados Unidos no necesariamente hay espacio para monedas independientes. Reino Unido fue un poco más lejos porque considera el concepto cripto que contempla la tecnología blockchain, y en segundo lugar porque contempla un espacio regulatorio experimental y dimensiona la innovación que se puede dar a través de los NFT, que son las iniciales de non fungible token que se refiere a propiedades digitales únicas afincadas en un blockchain.
FECHA DE CADUCIDAD
Las regulaciones tardarán al menos un par de años y específicamente para bitcoin implican una amenaza debido a que puede quedar relegada y muy acotada su utilización y perder atractivo como activo para resguardar valor.
El precio de bitcoin obedece a una oferta limitada dado el mecanismo de generación del activo que limita el número total a 21 millones y a una demanda entusiasta que muchas veces se guía únicamente por el precio, sin tratar de entender los motores que lo mueven, el problema para el precio es que cuando se dé la regulación, será muy claro que bitcoin está en desventaja frente a otros criptoactivos por los límites que le impone su estructura para poder realizar transacciones fáciles y baratas. El crecimiento del precio de bitcoin crece en función de la ilusión que le da a muchos poder escapar del imperio del dólar, los bancos centrales y el dinero fiduciario; es una ilusión en tanto que convertirse en una moneda real implicaría el cambio civilizatorio más profundo al menos de los últimos 400 años y si bien es cierto que pudiera ocurrir de hacerlo bitcoin, no sobreviviría por razones prácticas.
CRIPTO-DISTOPIA
Como toda tecnología, el dinero digital emitido por los bancos centrales tiene ventajas como su capacidad de combatir al crimen o de hacer mejores políticas públicas, pero también entraña un riesgo enorme, dado que en regímenes autoritarios les da un poder inmenso de controlar a sus gobernados. China ya ofrece algunos ejemplos del alcance de las medidas totalitarias que se pueden aplica a través del uso de la tecnología. Los entusiastas de bitcoin algunas veces muestran una convicción casi religiosa, lo que los ciega a las contradicciones de sus postulados. El blockchain tiene un gran futuro que no está vinculado a bitcoin en su estado actual.