¿Qué explica ese comportamiento atípico?
Uno de los personajes que más ayudó a aminorar el impacto de la peor crisis económica en México en las últimas décadas vive en otro país, muy probablemente vive en California, de donde arribó el 33% de los 23,618 millones de dólares que llegaron por concepto de remesas en el primer semestre de 2021.
De acuerdo con BBVA Research, ese mexicano probablemente envió su dinero a Guadalajara, pero también pudo haber sido a Tijuana o Morelia o incluso a la alcaldía Álvaro Obregón, en la Ciudad de México.
Cuando comenzó la pandemia se pensó que las remesas se iban a desplomar, como ocurrió en la crisis financiera originada por las hipotecas subprime en Estados Unidos. En octubre de 2008, los envíos de dinero a México aumentaron para luego descender, sin embargo, en la crisis generada por la pandemia, la caída fue más aguda que la de hace 11 años, aunque, en contraste, las remesas siguieron creciendo en los primeros meses de la recesión y lo han seguido haciendo desde entonces. ¿Qué explica ese comportamiento atípico? Todavía no está muy claro, sobre todo porque México contrasta con otros países como El Salvador, en donde las remesas sí tuvieron un desplome significativo.
El 30 de diciembre de 2020, la Reserva Federal de Estados Unidos publicó un análisis titulado: Remesas y covid-19: la historia de dos países, en el documento establecen una primera hipótesis en la que destacan la correlación entre la construcción de casas y las remesas, dado que un porcentaje alto de la mano de obra que se emplea en la construcción es migrante, por lo que el envío de remesas se encuentra vinculado al ritmo en la construcción de nuevas viviendas, con un retraso de cinco meses, es decir, el aumento de envíos de dinero a México en marzo 2020 correspondió a la construcción de nuevas casas en el último trimestre de 2019.
Al momento de publicación del documento, todavía no había suficientes datos con respecto a esa correlación entre construcción de nuevas casas y remesas, pero los datos correspondientes a junio de 2021 muestran que el análisis se sostiene y, además, que el crecimiento de remesas hacia México continuará. Otro elemento que cita el análisis de la Fed, y que no es nuevo, pero sí intuitivo, es que la comunidad migrante se desempeña en actividades esenciales, como el sector agrícola y la industria restaurantera, sobre todo en el área de cocina. El documento no lo plantea, pero hay que sumar una escasez de meseros y de personal para otros puestos en el sector servicios, dado que los cheques de estímulo han provocado que muchos estadunidenses no tengan incentivos para regresar a trabajar en puestos con bajos salarios.
Un dato que da una dimensión del heroico y trágico esfuerzo que realizaron los migrantes mexicanos en la pandemia lo retrata el Anuario de Migración y Remesas 2021, de BBVA Research, que muestra el porcentaje de mexicanos que murieron a causa de covid-19 por estado de la Unión Americana.
En primer lugar se ubicó California, que es la entidad de donde más se enviaron remesas a México, al mismo tiempo, en donde, desafortunadamente, murieron por covid-19 un 26% de los mexicanos. En segundo lugar se ubicó Nueva York, con 24%, y que fue el octavo estado de donde más salieron remesas a nuestro país; el tercer lugar fue Arizona, que fue el cuarto lugar por origen de dólares enviados vía trabajadores. En la cuarta posición de mortalidad covid-19 para mexicanos fue Illinois, que fue el sexto lugar emisor de remesas. En el quinto lugar por muertes de mexicanos por covid-19 se ubicó Texas, con una tasa de mortalidad de 6%, siendo el segundo estado de donde más se envían remesas. Lo anterior muestra el enorme costo que han pagado los mexicanos que trabajan en Estados Unidos para que las remesas se mantengan en récord, a pesar de la pandemia.
El misterio de las remesas es que desde el gobierno se presume la cifra del dinero que envían desde allá, al mismo tiempo que se reduce, año con año, el presupuesto de los consulados. Ojalá que en el Presupuesto 2022 no se dé un nuevo recorte.